Hoy voy a hablaros de higiene íntima femenina. Hace algo más de un mes pude asistir a un evento muy especial, en el que se presentaba toda la gama de Chilly (no sabía yo que era ya tan amplia), de la mano de la modelo Noelia López y la ginecóloga Belén Gómez García.
La presentación tuvo lugar en el gimnasio B3B, un espacio creado por mujer y para mujeres en el que han fusionado tres modalidades de ejercicio diferente: Bike, Box y Ballet. Podéis encontrar toda la información al respecto en su página web. Están en Madrid, en la calle Ayala 54, y me parece que podéis asistir a una clase gratuita.
La finalidad de realizar la presentación en un gimnasio es la concienciación de la necesidad de fortalecer los músculos pélvicos, que se ven muchas veces debilitados por la práctica de ejercicio; y en muchas ocasiones la ejercitación de estos músculos deben ir acompañados de una higiene íntima adecuada. Pero vamos por partes...
La distención del suelo pélvico se puede producir por varios motivos: embarazo, ejercicio de alto impacto (correr, saltar...), estreñimiento, problemas médicos... Estos problemas pueden aparecer también en mujeres jóvenes, y puede traducirse en incontinencia urinaria, disfunción sexual... La buena noticia es que se puede prevenir realizando ejercicios de Kegel, abdominales hipopresivos o por medio de usos terapéuticos de las famosas bolas chinas.
Como en todo este tipo de ejercicios se deben practicar de menos a más. Los ejercicio de Kegel, además de ayudar a fortalecer el suelo pélvico están relacionados con la calidad y la cantidad de los orgasmos. Consisten simplemente en contraer los músculos de la vagina, y se pueden realizar en cualquier lugar. Para empezar a hacerlos y saber si lo hacemos correctamente, el día de la charla la ginecóloga Gómez García nos proponía cortar el chorro de la orina durante 15 segundos cuando vayamos al baño. Cuando esto se controle se puede pasar al uso de bolas chinas, a mantenerlas dentro de la vagina durante 30 minutos (de nuevo esta información sale de las notas que tomé durante la charla).
Además para una buena salud genital es necesario que la higiene vaginal (vamos a hablar sin tapujos) sea la adecuada, y que esto deje de ser un tabú. ¿Es necesario utilizar un jabón íntimo a diario? Pues sinceramente no creo que yo tenga la autoridad para hacer una afirmación rotunda sobre este tema, ya que cada aparato es diferente, y para gustos los colores, así que mejor hablar esto con el ginecólogo. Supongo que usar jabones normales no es adecuado, ya que la vagina es una zona delicada, y mantener el pH neutro es indispensable.
Por mi parte he tenido jabón íntimo en mi baño siempre, desde que tengo la mentruación: el primero que utilicé fue el de Avón, porque en el instituto lo vendía para pagar parte de mi viaje de fin de curso y era el que tenía a mano. También compré varias veces el de Chilly, y el jabón íntimo de Chuches de Mujer, que es fantástico, así como toallitas de higiene íntima para el bolso. No los utilizo a diario. Cuando más tiro de ellos es en la semana de la regla, y los días en los que me suda hasta el alma. Imagino que una persona que hace ejercicio físico intenso a diario tendrá una necesidad mayor que la mía a la hora de usar este tipo de jabones.
Quiero hacer una puntualización especial en lo que a la acción desodorante de este tipo de productos ser refiere: si bien en la parte trasera de los envases (del verde para ser concreta), dice que ayuda a prevenir los olores... Durante la charla pregunté si estos geles tenían acción desodorante. La respuesta fue la que quería oír: no es necesario el uso de desodorantes vaginales a diario, porque, hablando el plata, el toto tiene que oler a toto, y si huele a otra cosa lo que hay que hacer es ir al médico. Otra cosa es que como decía más arriba tengamos un día de esos en los que nos suda hasta el alma y seamos más felices tirando de este tipo de productos (a mí personalmente me gusta llevar toallitas de higiene vaginal en el bolso aunque no las use siempre, por eso de sentirme limpita en algún momento puntual). Pero vamos, que con una higiene adecuada y si no existe ningún problema de tipo ginecológico los olores deberían entrar dentro de la normalidad.
Y dicho esto paso a contaros un poquito sobre los productos de Chilly, que dicho sea de paso, también los pueden utilizar los hombres. A ver si va a resultar que las únicas que tenemos que estar limpitas vamos a ser nosotras... Pero de eso podemos hablar largo y tendido en otra ocasión. No sabía yo que la gama de Chilly (marca por cierto italiana y que deberían haber meditado sobre el nombre al lanzarla en España...) era ya tan amplia...
Conocía la gama verde, la normal, la primera que lanzaron, en todos sus formatos. La gran cualidad de Chilly Gel es que aporta frescura gracias a su contenido en mentol natural. Este no va a ser fruto de devoción de todas, porque deja una sensación que en un primer momento impacta, de hecho más de una se habrá preguntado si es una sensación normal; da un pequeño picorcillo fresquito del que como os digo hay tanto amantes como 'odiantes'. Yo, y esta es una apreciación personal, me sitúo en el primer grupo, me gusta la sensación que deja. Está disponible en formato de viaje, así pequeñito de 50 ml y en toallitas.
El de color rosa es Chilly Delicado, para vaginas sensibles y delicadas, y que tiene Alóe Vera y Hamamelis. El envase dice que se puede usar en caso de irritaciones y enrojecimientos. Este todavía no lo he probado, pero a lo mejor es interesante usarlo tras la depilación... Está también disponible en toallitas.
Chilly Protect, el de color azul, tiene una acción protectora mayor frente a agentes externos, muy interesante de cara al uso de duchas públicas (gimnasios, spa, piscinas...), o durante el embarazo. Tiene para ellos Tomillo y Salvia, y está también disponible en toallitas.
Por último la novedad: Chilly Hidratante, el morado, con aceite de oliva, formulado para proporcionar hidratación y nutrición, indicado para momentos de sequedad vaginal (estrés, píldora, menopausia...).
Es raro no dar con alguno que se ajuste a nuestros gustos... Por mi parte me quedo el verde, he probado también el hidratante, y los otros dos como poco me llaman la atención para usar en momento puntuales y determinados. Además como ya os he indicado me gusta llevar en el bolso un paquete de toallitas, y alguna vez he llevado de viaje el pequeño.
Son productos seguros, son baratos, y por tanto os recomiendo que le echéis un ojo a los ingredientes: son un festival de siliconas y perfumes... Todos están dermatológica y ginecológicamente testados, y como os digo yo los uso de vez en cuando tan ricamente. Pero el uso diario y la valoración de sus ingredientes lo dejo al juicio y preferencias de cada una. Se pueden comprar en perfumerías y supermercados y cuestan al rededor de los 4 € los envases grandes de 250 ml, 2 € las toallitas (vienen 12 en cada paquete), y 1 € (aproximadamente) en formato de viaje de 50 ml. Estos dos últimos formatos son la mar de cómodos.
¿Sois usuarias de productos de higiene intima femenina? ¿Qué opinión tenéis de este tipo de productos? ¿Con qué opción y formato os sentís más cómodas?
Las imágenes del evento fueron realizadas por Namaste MJ.
La presentación tuvo lugar en el gimnasio B3B, un espacio creado por mujer y para mujeres en el que han fusionado tres modalidades de ejercicio diferente: Bike, Box y Ballet. Podéis encontrar toda la información al respecto en su página web. Están en Madrid, en la calle Ayala 54, y me parece que podéis asistir a una clase gratuita.
La distención del suelo pélvico se puede producir por varios motivos: embarazo, ejercicio de alto impacto (correr, saltar...), estreñimiento, problemas médicos... Estos problemas pueden aparecer también en mujeres jóvenes, y puede traducirse en incontinencia urinaria, disfunción sexual... La buena noticia es que se puede prevenir realizando ejercicios de Kegel, abdominales hipopresivos o por medio de usos terapéuticos de las famosas bolas chinas.
Como en todo este tipo de ejercicios se deben practicar de menos a más. Los ejercicio de Kegel, además de ayudar a fortalecer el suelo pélvico están relacionados con la calidad y la cantidad de los orgasmos. Consisten simplemente en contraer los músculos de la vagina, y se pueden realizar en cualquier lugar. Para empezar a hacerlos y saber si lo hacemos correctamente, el día de la charla la ginecóloga Gómez García nos proponía cortar el chorro de la orina durante 15 segundos cuando vayamos al baño. Cuando esto se controle se puede pasar al uso de bolas chinas, a mantenerlas dentro de la vagina durante 30 minutos (de nuevo esta información sale de las notas que tomé durante la charla).
Además para una buena salud genital es necesario que la higiene vaginal (vamos a hablar sin tapujos) sea la adecuada, y que esto deje de ser un tabú. ¿Es necesario utilizar un jabón íntimo a diario? Pues sinceramente no creo que yo tenga la autoridad para hacer una afirmación rotunda sobre este tema, ya que cada aparato es diferente, y para gustos los colores, así que mejor hablar esto con el ginecólogo. Supongo que usar jabones normales no es adecuado, ya que la vagina es una zona delicada, y mantener el pH neutro es indispensable.
Por mi parte he tenido jabón íntimo en mi baño siempre, desde que tengo la mentruación: el primero que utilicé fue el de Avón, porque en el instituto lo vendía para pagar parte de mi viaje de fin de curso y era el que tenía a mano. También compré varias veces el de Chilly, y el jabón íntimo de Chuches de Mujer, que es fantástico, así como toallitas de higiene íntima para el bolso. No los utilizo a diario. Cuando más tiro de ellos es en la semana de la regla, y los días en los que me suda hasta el alma. Imagino que una persona que hace ejercicio físico intenso a diario tendrá una necesidad mayor que la mía a la hora de usar este tipo de jabones.
Quiero hacer una puntualización especial en lo que a la acción desodorante de este tipo de productos ser refiere: si bien en la parte trasera de los envases (del verde para ser concreta), dice que ayuda a prevenir los olores... Durante la charla pregunté si estos geles tenían acción desodorante. La respuesta fue la que quería oír: no es necesario el uso de desodorantes vaginales a diario, porque, hablando el plata, el toto tiene que oler a toto, y si huele a otra cosa lo que hay que hacer es ir al médico. Otra cosa es que como decía más arriba tengamos un día de esos en los que nos suda hasta el alma y seamos más felices tirando de este tipo de productos (a mí personalmente me gusta llevar toallitas de higiene vaginal en el bolso aunque no las use siempre, por eso de sentirme limpita en algún momento puntual). Pero vamos, que con una higiene adecuada y si no existe ningún problema de tipo ginecológico los olores deberían entrar dentro de la normalidad.
Y dicho esto paso a contaros un poquito sobre los productos de Chilly, que dicho sea de paso, también los pueden utilizar los hombres. A ver si va a resultar que las únicas que tenemos que estar limpitas vamos a ser nosotras... Pero de eso podemos hablar largo y tendido en otra ocasión. No sabía yo que la gama de Chilly (marca por cierto italiana y que deberían haber meditado sobre el nombre al lanzarla en España...) era ya tan amplia...
Conocía la gama verde, la normal, la primera que lanzaron, en todos sus formatos. La gran cualidad de Chilly Gel es que aporta frescura gracias a su contenido en mentol natural. Este no va a ser fruto de devoción de todas, porque deja una sensación que en un primer momento impacta, de hecho más de una se habrá preguntado si es una sensación normal; da un pequeño picorcillo fresquito del que como os digo hay tanto amantes como 'odiantes'. Yo, y esta es una apreciación personal, me sitúo en el primer grupo, me gusta la sensación que deja. Está disponible en formato de viaje, así pequeñito de 50 ml y en toallitas.
El de color rosa es Chilly Delicado, para vaginas sensibles y delicadas, y que tiene Alóe Vera y Hamamelis. El envase dice que se puede usar en caso de irritaciones y enrojecimientos. Este todavía no lo he probado, pero a lo mejor es interesante usarlo tras la depilación... Está también disponible en toallitas.
Chilly Protect, el de color azul, tiene una acción protectora mayor frente a agentes externos, muy interesante de cara al uso de duchas públicas (gimnasios, spa, piscinas...), o durante el embarazo. Tiene para ellos Tomillo y Salvia, y está también disponible en toallitas.
Por último la novedad: Chilly Hidratante, el morado, con aceite de oliva, formulado para proporcionar hidratación y nutrición, indicado para momentos de sequedad vaginal (estrés, píldora, menopausia...).
Es raro no dar con alguno que se ajuste a nuestros gustos... Por mi parte me quedo el verde, he probado también el hidratante, y los otros dos como poco me llaman la atención para usar en momento puntuales y determinados. Además como ya os he indicado me gusta llevar en el bolso un paquete de toallitas, y alguna vez he llevado de viaje el pequeño.
Son productos seguros, son baratos, y por tanto os recomiendo que le echéis un ojo a los ingredientes: son un festival de siliconas y perfumes... Todos están dermatológica y ginecológicamente testados, y como os digo yo los uso de vez en cuando tan ricamente. Pero el uso diario y la valoración de sus ingredientes lo dejo al juicio y preferencias de cada una. Se pueden comprar en perfumerías y supermercados y cuestan al rededor de los 4 € los envases grandes de 250 ml, 2 € las toallitas (vienen 12 en cada paquete), y 1 € (aproximadamente) en formato de viaje de 50 ml. Estos dos últimos formatos son la mar de cómodos.
¿Sois usuarias de productos de higiene intima femenina? ¿Qué opinión tenéis de este tipo de productos? ¿Con qué opción y formato os sentís más cómodas?
Las imágenes del evento fueron realizadas por Namaste MJ.