Haul de Lush de Navidad. ¿Qué pasará en rebajas?

¿No os parecía raro que no hubiese paseado por aquí todavía productos de Navidad de Lush? ¡Y eso que tengo algunos desde octubre! Pero con tantos lanzamientos que hace la marca y de los que me hace felizmente partícipe parecía que no encontraba hueco para enseñároslos todos. Y luego todo esto lo tengo que ir gastando, ¡y qué feliz me hace!


Este año, y os aviso a todas porque queda poco, me he hecho con todo lo que quería antes de que llegaran las rebajas porque en los últimos años la gente arrasa. El año pasado además nos encontramos con la mala noticia de que en la web no habría productos rebajados, y este año, viendo que los productos de Navidad ya están marcados como 'Diles adiós', apunta la cosa a que no habrá rebajas online. Y dado que en las tiendas es difícil encontrar cosas concretas, mi consejo es que antes de que llegue el día 26 os hagáis con aquello que queráis de verdad.  Y tampoco deis por hecho que todo volverá al año que viene, porque puede no pasar. ¿Os imagináis un mundo sin Snow Fairy? Este año me he vuelto loca con este aroma tan característico de Lush.


No hay Navidad sin el gel de ducha de Lush Snow Fairy, con su purpurina... Con él no hay término medio, o se adora, o se odia. Yo soy del primer grupo. No soy de aromas dulces ni empalagosos, pero el de Snow Fairy me pierde: es dulce, muy dulce, huele a chuches, pero de una forma genial, no sé, es Snow Fairy, hay que probarlo. Yo me hago con uno todos los años, y esta vez directamente con el de 250 gramos (aún no me he dado al de litro), y al sólido, que el año pasado no me lo cogí. Así que tengo gel para rato. Por cierto, he notado que el sólido tiene mucho menos aroma que el líquido. Con este último cuando lo usaba mi baño olía durante horas, pero con el sólido me temo que no. Pero bueno, todo sea porque no usan envases. Además este gel sólido es el más barato de cuantos Lush ha traído por Navidad, ronda los 10€. El líquido cuesta unos 14 € la versión de 250 gramos.


Siguiendo con Snow Fairy, también tengo en mi poder los acondicionadores corporales tanto en versión sólida como fluida. Ya había probado ambos, y son estupendos, perfectos para perezosas, para cuando no os apetece hidrataros al salid de la ducha. Esto se usa con la piel mojada, se aplica, y se aclara. Rápido, cómodo, fácil y eficaz. En este caso me gusta más la versión sólida, porque cunde más y el aroma perdura en la piel durante horas. Eso sí, hay que aclararlo a conciencia porque si no se hace, y la toalla con la que os secáis es clara, puede quedarse manchada de rosa (sí, me ha pasado). Por lo demás me pierde. Tengo uno a medias en la bañera y ya tengo repuesto. Pensaba cambiar de aroma pero en realidad este me hace feliz. Y en cuanto al aroma de ambos son idénticos a los del gel. La versión sólida cuesta unos 13 € y la líquida unos 24 € el bote de 225 gramos ( me suena que existe una versión de 100 gramos más económica).


Este años han lanzado además dos geles de Edición Limitada de Navidad: Por un lado Cinders, que tiene por protagonista la calabaza. Es un aroma extraño pero agradable, con un toque así especiado, aunque esperaba que oliese más a especias la verdad. Por otro lado Sleepy: cuando lanzaron el primer productos de la gama, la crema corporal, lo petaron con el aroma hasta el punto de dejarla en el lineal fijo. Luego sacaron otros productos con el mismo aroma, pero faltaba el gel, que huele a lavanda y que me encanta. Tanto que tengo dos. Ambos geles por cierto tienen versión sólida. No os puedo decir mucho más porque aún no los he probado. Me parece que andan en los 7,50 € el formato de 110 gramos.


Uno de los productos más económicos de las Ediciones de Navidad de Lush 2018 (creo que este año han sacado pocos productos económicos, y veo los precios un poco más elevados de lo habitual) ha sido este exfoliante corporal sólido, Sugar Plum Fairy, que es muy similar al desaparecido Sugar Scrub, cambia el color y el aroma, que el de Plum es más dulce. Lo he dejado solo para los muslos y mi culo serrano, porque es un exfoliante durito, fuerte, con grano grueso y compacto, y que hay que usar con cuidado para no arañar la piel. Ojito. Cuesta 3,95 €. Si os hacéis con él cuidaos de dejarlo donde no se moje, porque se puede deshacer.


Este colorete-iluminador en stick llegó más tarde a la tienda, creo que solo esta disponible online al menos en España. Se llama Snow Fairy Glow Sticky yo me hice con él en Lush Oxford Street. Ni lo dudé al verlo, tenía que ser mío. En tono rosa chicle (suave, nada escandaloso) y a tope de shimmer azul (esta parte sí es escandalosa, no es apto para tímidas), no está dentro de mis preferencias en cuanto a iluminadores pero estoy disfrutando muchísimo con él. Es genial, muy navideño, muy divertido, muy chulo, pero nada universal. Cuesta unos 15 € y solo se compra online. Aquí por cierto os hablé de los iluminadores en stick de Lush.


Este jabón es posiblemente unos de mis favoritos de Lush. Es Golden Pear, lo lanzaron por primera vez el año pasado y me enamoré de él nada más verlo on line. Cuando lo olí perdí la cabeza. Me lo compré enseguida y quise comprar más en rebajas pero fue imposible, se agotó enseguida. Así que este año en cuanto lo vi... me hice con él. No he olido nada igual en mi vida, es una maravilla, un regalo genial, y un autoregalo todavía más genial. Este año tiene menos purpurina, recuerdo que era un jabón cremoso, no resecaba. No es barato, cuesta (o creo que costaba, porque ya no doy con él en la web, debe estar ya agotado) en torno a los 9 €, pero repetiría con él una y otra vez.


Esto, por último, es un jabón prensado en frío de aroma Snow Fairy que tampoco encuentro ya en la web, imagino que también se ha agotado ya. El año pasado también quise esperar a rebajas para hacerme con él pero también se agotó, así que este año no he esperado y me lo he traído conmigo. No puedo deciros mucho más porque es nuevo para mí, pero me han dicho que dura mucho. Tampoco recuerdo su precio me temo, pero os iré diciendo.