Por la tarde nos desplazamos a la costa, hacia el Silken Park Hotel San Jorge situado en la Playa d'Aro, en la Costa Brava. Situado en un lugar más que privilegiado y con unas vistas de escándalo, pude gozar de una habitación pequeña pero preciosa, con una decoración bonita y cuidada, y un balcón que daba hacia un pequeño pinar tras el que se encontraba la playa y el mar. Al llegar a penas pude ver el paisaje, pero por la mañana lo primero que vi al levantarme fue esto:
El Hotel cuenta con el Spa Winter&Summer (concepto que pretende dar tratamientos seleccionados en función de la época del año para optimizar los beneficios en la piel y relajarse), en el que realizan tratamientos faciales y corporales a base de flores, aprovechando las propiedades milenarias que tienen. Me gustaría decir que pude catar uno de estos tratamientos pero finalmente opté por un masaje de pies y un poco de reflexología (eso de que me toquen los pies me encanta...). Tras hacer el circuito del precioso spa (sí, esta vez pudimos gozar del agua), un masaje de pies me dejó en las nubes. Este Spa por cierto, pequeño pero con una bonita decoración, contaba también con sauna, baño turco, duchas de agua a presión, piscina... Después una buena cena (otra vez una cocina de escándalo), y aquella noche pude descansar de verdad, por fin.
Como os decía la mañana me despertó con unas vistas maravillosas, y no tuve ninguna prisa por salir de la habitación, no sabéis lo a gusto que estaba allí... Creo que cuando tenga que pensar en un lugar agradable pensaré en la habitación 264 del San Jorge... El desayuno fue de nuevo un despropósito y por la mañana pudimos disponer de un poco de tiempo libre. Y la verdad es que disfrutar del hotel, sus vistas, su bonita decoración, la serenidad que había allí, y bajar a su playa privada fue genial.
La guinda final a nuestro viaje se la puso la visita a la finca rural Bell-Lloc, un paraíso para aquellos que deseen perderse en la naturaleza, la buena gastronomía, la decoración cuidada al detalle y el vino. La finca cuenta con una bodega propia, excavada bajo el propio viñedo y causando el menor impacto en el ambiente y el paisaje en que se encuentra, una instalación que aúna respeto, ecología, vanguardia y vino (matizo, buen vino). Desde sus tierras puede verse un precioso valle rematado por el Mar Mediterráneo al fondo. Un auténtico paraíso.
La finca cuenta con una casa rural al que, si tenéis oportunidad, tenéis que ir. Uno de esos lugares de ensueño perdidos en la naturaleza. Creo que la casa contaba con a penas 6 habitaciones, todas ellas diferentes, y cada una decorada y preparada con un esmero que pone los pelos de punta. De nuevo disfrutamos de la gastronomía de la zona, esta vez de comida casera preparada con productos hechos o cosechados en la finca (queso, aceite, escalivada, embutido, sobrasada...), y aderezado con sus propios vinos. La verdad es que me habría quedado un ratito más...
Y esta fue mi aventura por Girona. ¡Qué bien nos trataron en todas partes! Me chifla en norte, y sin duda volveré a Girona, con suerte más de una vez. Mirad que el tiempo no acompañó durante el viaje, pero en ningún momento resultó molesto, ¡hacía tiempo de spa! Lugares para perderse, para desconectar y sobre todo para disfrutar.
Por supuesto agradecer a los organizadores y al Patronato de Turismo de Girona haber hecho posible este fantástico viaje, ¡ha sido todo un descubrimiento! Por el fantástico trato que recibimos por parte de todo el mundo, y por ese objeto con el que nos obsequiaron, y que ahora es común y cariñosamente conocido como La Lanza...
Enlaces de interés:
http://www.spahotelsanjorge.com/
http://www.hoteles-silken.com/hoteles/park-hotel-san-jorge-platja-d-aro/
El Hotel cuenta con el Spa Winter&Summer (concepto que pretende dar tratamientos seleccionados en función de la época del año para optimizar los beneficios en la piel y relajarse), en el que realizan tratamientos faciales y corporales a base de flores, aprovechando las propiedades milenarias que tienen. Me gustaría decir que pude catar uno de estos tratamientos pero finalmente opté por un masaje de pies y un poco de reflexología (eso de que me toquen los pies me encanta...). Tras hacer el circuito del precioso spa (sí, esta vez pudimos gozar del agua), un masaje de pies me dejó en las nubes. Este Spa por cierto, pequeño pero con una bonita decoración, contaba también con sauna, baño turco, duchas de agua a presión, piscina... Después una buena cena (otra vez una cocina de escándalo), y aquella noche pude descansar de verdad, por fin.
La guinda final a nuestro viaje se la puso la visita a la finca rural Bell-Lloc, un paraíso para aquellos que deseen perderse en la naturaleza, la buena gastronomía, la decoración cuidada al detalle y el vino. La finca cuenta con una bodega propia, excavada bajo el propio viñedo y causando el menor impacto en el ambiente y el paisaje en que se encuentra, una instalación que aúna respeto, ecología, vanguardia y vino (matizo, buen vino). Desde sus tierras puede verse un precioso valle rematado por el Mar Mediterráneo al fondo. Un auténtico paraíso.
La finca cuenta con una casa rural al que, si tenéis oportunidad, tenéis que ir. Uno de esos lugares de ensueño perdidos en la naturaleza. Creo que la casa contaba con a penas 6 habitaciones, todas ellas diferentes, y cada una decorada y preparada con un esmero que pone los pelos de punta. De nuevo disfrutamos de la gastronomía de la zona, esta vez de comida casera preparada con productos hechos o cosechados en la finca (queso, aceite, escalivada, embutido, sobrasada...), y aderezado con sus propios vinos. La verdad es que me habría quedado un ratito más...
Y esta fue mi aventura por Girona. ¡Qué bien nos trataron en todas partes! Me chifla en norte, y sin duda volveré a Girona, con suerte más de una vez. Mirad que el tiempo no acompañó durante el viaje, pero en ningún momento resultó molesto, ¡hacía tiempo de spa! Lugares para perderse, para desconectar y sobre todo para disfrutar.
Por supuesto agradecer a los organizadores y al Patronato de Turismo de Girona haber hecho posible este fantástico viaje, ¡ha sido todo un descubrimiento! Por el fantástico trato que recibimos por parte de todo el mundo, y por ese objeto con el que nos obsequiaron, y que ahora es común y cariñosamente conocido como La Lanza...
Enlaces de interés:
http://www.spahotelsanjorge.com/
http://www.hoteles-silken.com/hoteles/park-hotel-san-jorge-platja-d-aro/